sábado, 6 de agosto de 2011

NAVIDADES 2007 EN RIVIERA MAYA

Día 5. 26/12/2007

Hoy tocaba excursión a Chichen Itza. A las 7:50 nos pasaron a recoger puntualmente los de Infocenter con una van. Ya venía un matrimonio francés con su hija del Lupita y luego tuvimos que ir a recoger a más gente por otros hoteles. Aquí comenzó el caos. Estuvimos esperando por 2 parejas más de 20 minutos en un hotel. La gente es super irresponsable. Si te dicen una hora, pues preséntate a esa hora. Ya fuimos arrastrando retrasos todo el día. Cuando ya estábamos todos a bordo nos dirigimos a Tulum y allí paró en un supermercado (Stop &Go) por si alguien necesitaba ir al baño o quería comprar algo (otros 20 minutos perdidos).
El viaje a Chichen se me hizo eterno. Más de 4 horas entre paradas, retrasos y chorradas varias. El conductor nos fue metiendo por aldeas para que viéramos cómo vivía la gente y todavía tardó más. A mí me pareció bien lo de las aldeas, pero sólo en parte, porque ya había contratado una excursión para ver aldeas mayas, entonces hubiera preferido que diese menos rodeos y nos llevase directos a Chichen.
Llegamos a Chichen a las 12. Hacía un calor de mil demonios y no he visto tal concentración de gente en mi vida ( ni en sitios como La Torre Eiffel o El Vaticano, que están siempre hasta arriba). Estaban completamente desbordados. Nos pusieron una pulserita verde y nos dieron el ticket de entrada y aún tuvimos que esperar 15 minutos para entrar porque el guía no aparecía. Me pareció un auténtico desbarajuste. Muy mal organizado para tantísima gente. Una vez dentro (12:20). Nos dice el guía que tenemos que esperar a una de las parejas que se ha ido al baño. ¡Por Dios! ¿no podían haber ido antes, que hemos estado tanto tiempo esperando sin hacer nada?.... y para colmo nos dice también que la visita va a acabar a las 2. ¿De qué va este tío? ¿Pretende que en hora media nos dé tiempo a ver todo y a hacer compras?. Yo entonces ya me quemé de tal manera que agarré a mi marido de la mano y le dije:¡vámonos a nuestra bola, que estoy hasta el gorro de esta peña! Y nos piramos.

Consejo: los que seáis como yo alérgicos a los viajes organizados, a los rebaños que siguen a un guía, a que te digan dónde, cómo y cuándo tienes que hacer las cosas ALQUILAOS UN COCHE Y HACED LAS EXCURSIONES POR VUESTRA CUENTA. Yo quería alquilarlo pero mi marido empezó a decir que si a ver si iba a ser peligroso.......para nada. Me fui fijando bien por la carretera y no es nada difícil conducir por allí. Lo único que los cambios de sentido y dirección se hacen desde la mediana.

Bueno, Chichen me gustó pero me esperaba mucho más. Son unas ruinas muy bonitas y la pirámide es preciosa, pero después de haber visto las pirámides de Egipto, se queda un poco deslucido. Es una opinión personal, pero luego ha habido más gente que ha coincidido conmigo. Aún así, merece la pena y yo volvería a ir, pero, ya os he dicho, a mí aire. Estuvimos viendo todo y de vez en cuando nos arrimábamos a algún grupo y oíamos parte de la explicación del guía. Como ya habíamos leído bastante sobre el sitio no nos hizo falta más. 




















Hay un montón de tenderetes para comprar recuerdos y luego hay vendedores ambulantes que te dan bastante la brasa. Nosotros preferimos dejar las compras para el final para no ir cargados. Compramos algunas cosillas, pero regateando a muerte. Ha sido el sitio donde más me ha costado sacar buenos precios, después de haberme entrenado a conciencia en Egipto, Marruecos, Túnez y Turquía. Estos mexicanos son duros de pelar, pero yo soy todavía más pesada que ellos, jejejeje... (mi marido a veces pasa vergüenza ajena en estas situaciones). Al final compré una máscara de madera pintada grandota por 220 pesos (me pidió 800), dos máscaras de oxidiana preciosas por 100 pesos cada una. Varias figuras de dioses en piedra por 80 pesos. Unos cuencos de cerámica pintados muy chulos por 40 pesos cada uno y un imán para el frigo por 15 pesos. Es verdad que en Chichen es donde mejores precios puedes sacar pero si te lo curras un montón. En Playa del Carmen vimos tiendas con precios fijos muy parecidos a lo que yo había pagado (un poco más caros, pero no demasiado). Así que ya sabéis, regatead salvajemente porque se cuelgan un montón.

A las 2 salimos y nos tocó esperar media hora hasta que salió el resto del rebaño. Ninguno había podido hacer compras, porque el guía no les dejó tiempo libre.

De ahí nos llevaron a comer al restaurante Fiesta, que está muy cerquita. La comida era pasable. Lo que más me gustó fue el postre, tenían una especie de torrijas que estaban riquísimas. Las bebidas se pagan a parte. Agua: 20 pesos. Cerveza (Sol): 25 pesos. Refrescos: 25 pesos. Durante la comida salen unos niños y unas señoras con el traje típico y hacen unos bailes tradicionales ( a cambio de la correspondiente propina). No me gustó demasiado, pero bueno.





De ahí fuimos al Cenote Ik Kil. Me gustó el sitio (es impresionante), pero no me bañé porque había demasiada gente y me agobié. Para los que no sepáis nadar bien o tengáis miedo (da un poco de cosilla porque cubre un montón y no se ve el fondo) alquilan unos chalecos salvavidas (por 25 pesos). 




Nos habían dado 40 minutos, pero, para variar, nos tocó esperar una hora por una parejita de finlandeses (los mismos que nos habían hecho esperar por la mañana).
De ahí nos pusimos rumbo a Valladolid. Cuando llegamos era casi de noche y no pudimos ver nada. Sólo la iglesia y la plaza. De todas las maneras, me pareció una ciudad muy corriente y con poco de interés. Si fui es porque yo soy de Valladolid y me parecía curioso haber estado en 2 ciudades que se llaman igual en 2 sitios tan lejanos.
Nos dieron media hora libre y entramos en una tienda de artesanía. Vendían el licor típico de la ciudad (Xtabentún) a 330 pesos la botella. Yo lo había comprado en un super de Playa del Carmen en 2x1 a 175 pesos. Así que, no compréis allí. Lo que sí me llevé fue una piel de venado grande (55 x 45) y pintada con unos dioses. Me pidieron 950 pesos, me la llevé por 300. Ya la he enmarcado entre 2 cristales y queda espectacular.
Sobre las 5:45 volvimos a la van y emprendimos el camino de vuelta a los hoteles. Lo pasé francamente mal en el viaje porque el conductor iba a toda leche por unas carreteritas del demonio y no se veía nada (la iluminación allí no tiene nada con ver con la de aquí). Nos puso la película de Apocalipto (llevaba DVD en la van). Me pareció muy apropiada, después de haber estado viendo ruinas mayas., aunque es bastante sangrienta.
A medio camino nos encontramos un control policial. Habían puesto una hoguera delante del coche y otra detrás para señalizarlo. Nunca había visto algo así. A nosotros no nos pararon, pero había varios coches retenidos. Un poco de acojone.
Fuimos dejando a la gente por los hoteles y llegamos al Tequila a las 8:30 reventados. Vaya palizón de viaje. Duchita, cena, 2 copazos y a dormir, que al día siguiente tocaba excursión de nuevo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario